Dos de sus componentes, el cineol y el eugenol, son los que le otorgan al laurel su propiedad principal: facilitar las digestiones, así como prevenir la acidez y reducir los gases presentes en el conducto digestivo y que tantas molestias ocasionan.
Estos mismos principios activos también tienen la propiedad de mejorar y estimular el apetito por lo que, en ciertos tratamientos de fitoterapia destinados a personas que necesitan ganar peso, se recomiendan las infusiones de laurel antes de las comidas principales.
Si hierve las hojas de laurel en un vaso de agua y lo prueba, no tendrá ni olor ni sabor.
Entre las múltiples especias que tienen lugar en tu cocina, seguramente no falta el laurel, pues, al igual que otros condimentos como el orégano y el comino, resulta un ingrediente indispensable para darle sabor y un agradable aroma a muchísimos platillos.
Debido a sus cualidades aromáticas, el laurel ha sido muy apreciado en diferentes industrias, muy especialmente en la culinaria, donde se le emplea como especia o condimento, para lo cual es necesario llevar a cabo el secado de sus hojas que, de no ser sometidas a dicho proceso, podrían resultar tóxicas.
Las asombrosas propiedades que posee han hecho del laurel una hierba muy valorada en el campo de la medicina natural, ayudando en el tratamiento de múltiples dolencias.
Agregar hojas de laurel a la carne, convierte los triglicéridos en grasas mono y para experimentación y confirmación, haz lo siguiente:
- Corta un pollo por la mitad y, cocina cada mitad en un tazón y le agrega una hoja de laurel en una y, la otra sin la hoja de laurel, y observa la cantidad de grasa en las dos ollas.
Si tiene hojas de laurel, no hay necesidad de ir a la farmacia. Estudios científicos recientes, han demostrado que las hojas de laurel tiene muchos beneficios.
Los beneficios de la hoja de laurel:
- La hoja de laurel trata los trastornos digestivos y ayuda a eliminar los bultos.
- Acidez estomacal
- Reflujo
- Estreñimiento
- Regula el movimiento intestinal, tomando té de hoja de laurel caliente.
- Reduce el azúcar en la sangre, y la hoja de laurel también es un antioxidante.
- Le permite al cuerpo producir insulina al comerla o beber té de laurel durante un mes.
- Elimina el colesterol malo y alivia los triglicéridos del cuerpo.
- Muy útil en el tratamiento del resfriado común, la gripe y la tos severa, ya que es una rica fuente de vitamina "C", puede hervir las hojas y tomar inhalaciones del vapor, para deshacerse de la flema y reducir la gravedad de la tos.
- La hoja de laurel al consumirse, protege al corazón de las convulsiones y los accidentes cerebrovasculares, ya que contiene compuestos de protección cardiovascular.
- Rico en ácidos, como el ácido cafeico, quercetina, eigonol y bartholinida, sustancias que evitan la formación de células cancerosas en el cuerpo.
- Elimina el insomnio y la ansiedad, si se toma antes de acostarse, ayuda a relajarse y dormir tranquilo.
- Beber una taza de hojas de laurel hervido, dos veces al día, rompe los cálculos renales y cura las infecciones.
También puede usarse de forma tópica para regenerar la epidermis o para tratar ciertas afecciones de la piel causadas por hongos, así como para contusiones, quemaduras, úlceras, abscesos o acné. El aceite de laurel se utiliza en aromateriapia para aliviar el dolor muscular.
¿Cuáles son las contraindicaciones y efectos secundarios del laurel?
Si bien es cierto que se trata de una hierba bastante beneficiosa, existen algunas contraindicaciones y efectos secundarios que se han asociado al consumo indebido de laurel, los cuales debes tener en cuenta para evitar mayores complicaciones.
- Mujeres embarazadas y en periodo de lactancia.
- Niños menores de 6 años.
- Pacientes con colitis, úlceras gastroduodenales, gastritis, enfermedad de Crohn y síndrome de intestino irritable.
- Pacientes con epilepsia, Parkinson y otras patologías que afecten al sistema nervioso.
- Personas con alergias respiratorias.
- Pacientes con hipersensibilidad a los aceites esenciales.
En cuanto a los efectos secundarios, una ingesta frecuente de infusiones de laurel altamente concentradas podría provocar náuseas, vómitos, gastritis y úlceras estomacales. Asimismo, su uso indebido sobre la piel podría producir dermatitis de contacto, entre otras reacciones adversas.