¿Alguna vez has sentido la necesidad de comer de forma impulsiva sin tener realmente hambre? esto es hambre emocional, un trastorno relacionado con evadir emociones.
Este anhelo se da por satisfacer ese “algo” que mantiene poco tranquila la mente, en otras palabras ansiedad y es consecuencia de conflictos emocionales sin resolver.
Por un lado el hambre física es efecto de la exigencia a nutrirnos, mientras que el hambre emocional pretende controlar con comida los sentimientos. Algunas de sus características son:
- Buscar excusas para comer, aún sin sentir apetito.
- Sentir culpa después de los ataques de hambre.
- Después de comer en exceso sentir un vacío o inquietud.
- Comer en ese preciso momento y no poder posponerlo.
Cómo controlarlo
Para solucionar este problema es importante conocer desde raíz qué lo provoca, descubrir qué tipo de sentimiento desencadena comer de esta manera.
Es recomendable acudir con un especialista y conocer la gravedad del caso, sin embargo existen algunos consejos que pueden ayudar a mantener el hambre emocional bajo control:
- Menú de comidas, dejar de comer no es la solución, al contrario, podría desencadenar aún más hambre y generar atracones. Lo ideal es elaborar un calendario semanal de alimentos con horas y porciones, asegurándose que comes lo suficiente, al sentir cualquier tipo de antojo reflexiona sobre sus causas.
- Comer granos, frutas y verduras en abundancia, la fibra soluble en estos alimentos absorbe grandes cantidades de agua, lo que te hará sentir satisfecho por más tiempo evitando antojos.
- Evitar el azúcar, es común abusar de alimentos azucarados y procesados, además de ser muy rápidos y sencillos de comer. Una buena estrategia es no tener este tipo de productos en casa o sustituirlos por opciones más saludables.
- Hacer ejercicio, es una herramienta poderosa para manejar el estrés y la ansiedad, mantenerte activo por 30 minutos diarios eleva los niveles de serotonina en el cerebro, como consecuencia te sentirás más positivo.
Lo más importante es trabajar en auto-conocimiento, observar tus emociones al sentir la necesidad de comer impulsivamente y trata de rastrear su origen.
PRONAPRESA
"Porque prevenir es mejor que curar"